PRÁCTICA 3 : SEIS SOMBREROS PARA PENSAR.

Mi tercera práctica de intervención de fisioterapia en la comunidad y gestión, se llamaba 6 sombreros para pensar… antes de la práctica, sinceramente, nunca había escuchado nada sobre eso, no sabía en qué consistía ni qué era lo que íbamos a tener que hacer, así que para que a vosotros no os pase lo mismo y sepáis de qué va esto os explico,  los seis sombreros para pensar es una técnica creada por Edward de Bono, es utilizada para poder analizar una decisión desde varios puntos de vista o perspectivas. Esto fuerza a cambiar la forma habitual de pensar y nos ayuda a formas diferentes visiones de una situación.

Cuando nos ponemos estos sombreros queremos transmitir un tipo de pensamiento diferente, nos permiten conducir nuestro pensamiento, tal como un director podría dirigir su orquesta. Resulta muy útil para hacer desviar a la gente de su rol habitual, y llevar a pensar de un modo distinto sobre el tema del caso, en nuestra práctica hemos debatido sobre nuestro sistema nacional de salud. Cada uno de los sombreros tiene un significado: 

1. Sombrero blanco: “información pura”, sin prejuicios, sin sentimientos ni emociones, basada en lecturas, documentos, fuentes lo más asépticas posibles. Cifras. 
2. Sombrero verde: creatividad, “pensamiento creativo”, “lluvia de ideas”de aspectos únicos, exclusivos, imaginativos... 
3. Sombrero amarillo: aspectos que iluminan el análisis, pensamiento optimista, aspectos positivos y bondadosos de ese fenómeno, es lo amable de la realidad. 
4. Sombrero rojo: opiniones con sentimientos, corazón, visceralidad, pueden ser aspectos positivos o negativos, cosas que me gusten o no, que deseo o que no me gustaría que pasaran. 
5. Sombrero negro: es el juicio crítico negativo del análisis, pensamiento negativo, es el “abogado del diablo”. 
6. Sombrero azul: es el director de la orquesta, identificar aspectos por los que se justifique el análisis que estamos haciendo así como los aspectos que pueden influir positiva o negativamente en dicho análisis, en nuestro caso el directo de la orquesta sería nuestra profesora Marina. 

 Aquí podéis ver mi opinión con cada uno de los seis sombreros. 

Como conclusión de esta práctica decir que al principio. como conclusión de esta práctica quería hacer una pequeña reflexión sobre la importancia de cambiarnos de sombrero en determinados momentos de nuestra vida, una cosa que me llamó mucho la atención fue nuestra preocupación mientras hacíamos los sombreros de que no nos iban a quedar bien, cada vez que hacíamos uno intentábamos mantener el equilibrio con los picos del sombrero puestos hacia arriba sin que nadie nos hubiera dicho que eso era así, era nuestra realidad y a nadie se le ocurrió pensar que, tal vez, si lo poníamos al contrario sería mas cómodo para nosotros..

                            

Pues bien, después de que Marina nos dijo que por qué no habíamos intentado ponerlos al contrario fue una forma de darme cuenta que, a veces, sin pensarlo estamos colocándonos un sombrero determinado sin pensar que la otra persona puede estar viéndolo desde otra perspectiva, es algo que pensamos en ocasiones pero, que después de esta práctica me hizo ver que tenemos que hacerlo constantemente. 

En relación a la práctica decir que no fue complicado colocar cinco aspectos sobre el sistema nacional de salud en cada uno de los sombreros, a pesar de que no estábamos muy informados para poner cifras en el sombrero blanco, pero !conseguimos sacar los cinco!, lo que sí me llamó mucho la atención es la facilidad con la que me salían las cosas en el sombrero rojo, y que a lo largo de la práctica, sin quererlo, acabábamos sacando conclusiones desde el punto de vista del sombrero rojo, es algo que nos ocurre habitualmente en nuestro día a día y considero que, en ocasiones, es importante no hablar desde ese punto de vista, sino desde el sombrero blanco, con datos objetivos sin que nos influyan nuestros sentimientos, aunque todos sabemos que eso es difícil.

Para terminar decir que al inicio de la práctica no me gustó mucho eso de hacer sombreros, lo vi una pérdida de tiempo, pero a lo largo de la práctica me fue convenciendo esa idea de tener todos el mismo sombrero para poder hablar bajo la misma visión, era algo nuevo, diferente que, como normalmente al principio juzgué desde mi sombrero rojo pero al final, con mi sombrero blanco puedo decir que se aprende mucho sobre el tema que se expone ya que terminas conociendo todos los puntos de vista de, en este caso, el sistema nacional de salud, algo muy importante para nosotros y el cual debemos conocer bien.